GURÚS DE SELF-REALIZATION FELLOWSHIP
Los Gurús de Self-Realization Fellowship/Yogoda Satsanga Society of India son: Jesucristo, Bhagavan Krishna y una sucesión de excelsos maestros de la era contemporánea: Mahavatar Babaji, Lahiri Mahasaya, Swami Sri Yukteswar y Paramahansa Yogananda. Demostrar la armonía y la unidad esencial que existe entre las enseñanzas de Jesucristo y los preceptos del Yoga enseñados por Bhagavan Krishna constituye parte integrante de la labor encomendada a SRF. A través de sus sublimes enseñanzas y de su divina mediación, todos estos Gurús contribuyen al cumplimiento de la misión de Self-Realization Fellowship de ofrecer a toda la humanidad una ciencia espiritual práctica para alcanzar la unión con Dios.
[Tomado del Glosario del libro “Viaje a la Iluminación” por Paramahansa Yogananda]
CRISTO
La intercesión divina, cuyo fin es mitigar los efectos de la ley cósmica de causa y efecto [el karma] por la cual el ser humano sufre a consecuencia de sus errores, estaba presente en el corazón mismo de la misión de amor que Jesús hubo de cumplir en la tierra. Jesús vino a mostrar la misericordia y la compasión de Dios, cuyo amor es un refugio que nos protege, incluso, del rigor de la ley. Ya fuera como el pequeño bebé en el pesebre de Belén, o como el salvador que sanaba a los enfermos, resucitaba a los muertos y aplicaba el bálsamo del amor sobre las heridas de los errores, el Cristo presente en Jesús vivió entre los seres humanos como uno más, para que también ellos pudieran aprender a vivir como dioses.
Recuerda: Cristo busca los templos de las almas sinceras; él ama el silencioso altar de la devoción erigido en tu corazón, donde moras con él en un santuario iluminado por la luz perpetuamente encendida de tu amor. Aquellos que meditan con devoción recibirán a Cristo en el altar de calma de sus propias conciencias.
[Párrafos tomados del libro “El Yoga de Jesús”, por Paramahansa Yogananda].
En su sitio web Self-Realization dice sobre Cristo:
“Una de las metas esenciales de la misión de Paramahansa Yogananda era ‘revelar la completa armonía y la unidad básica existentes entre las enseñanzas del Cristianismo y las del Yoga, tal como fueron formuladas originalmente por Jesucristo y por Bhagavan Krishna, respectivamente; y demostrar que las verdades contenidas en dichas enseñanzas constituyen los fundamentes científicos comunes a toda religión verdadera.’
“La total comprensión de las enseñanzas originales de Jesucristo – incluyendo el hecho de que concedió a sus discípulos las técnicas esotéricas de la meditación yoga – es revelado en el profundo comentario de Paramahansa Yogananda sobre los Evangelios: The Second Coming of Christ: The Resurrection of the Christ Within You.”
El libro “El Yoga de Jesús” es una concisa recopilación de esta obra.
BHAGAVAN KRISHNA
Las sublimes enseñanzas del Señor Krishna están conservadas en el Bhagavad Guita. En su aclamado comentario del Guita, Paramahansa Yogananda ha escrito:
“… El Guita se considera la esencia de los cuatro Vedas, de los 108 Upanishads, y de los seis sistemas de filosofía Hindú. Todo el conocimiento del cosmos está contenido en el Guita. Supremamente profundo, y sin embargo expresado en un revelador lenguaje de confortadora belleza y simplicidad, el Guita ha sido comprendido y aplicado en todos los niveles del comportamiento humano y del esfuerzo espiritual… Dondequiera que uno esté en el sendero de regreso a Dios, el Guita arrojará su luz en ese segmento del viaje...
“Krishna es el ejemplo divino del yoga en el Oriente; Cristo fue elegido por Dios como el ejemplo de la unión con Dios para el Occidente… La técnica de Kriya Yoga, enseñada por Krishna a Arjuna y a la cual se refieren los capítulos IV:29 y V:27-28 del Guita, es la suprema ciencia espiritual de la meditación yoga. Oculta durante las eras materialistas, este yoga indestructible fue revivido para el hombre moderno por Mahavatar Babaji y enseñado por los Gurús de Self-Realization Fellowship/Yogoda Satsanga Society of India.”
[Tomado del sitio web de SRF].
MAHAVATAR BABAJI
Fue Mahavatar Babaji quien revivió para esta era la perdida técnica de meditación del Kriya Yoga. Al conceder la iniciación en Kriya a su discípulo Lahiri Mahasaya, Babaji dijo: “El Kriya que por tu intermedio estoy dando al mundo en este siglo diecinueve, es la misma ciencia que Krishna le dio hace milenios a Arjuna; y que fue más tarde conocida por Patanjali y por Cristo, y por San Juan, San Pablo y otros discípulos.”
Poco antes de que Yogananda partiera para América en 1920, Mahavatar Babaji vino al hogar de Yoganandaji en Calcuta, donde el joven monje oraba profundamente por la seguridad divina con respecto a la misión que estaba por emprender. Babaji le dijo: “Sigue el mandato de tu Gurú y ve a América. No temas; estarás protegido. Tú eres el que he escogido para esparcir el mensaje de Kriya Yoga en Occidente.”
[Tomado del sitio web de SRF].
LAHIRI MAHASAYA
[Tomado del Glosario del libro “Viaje a la Iluminación ”, por Paramahansa Yoganananda].
Paramahansa Yogananda escribió en la Autobiografía de un Yogui: “Así como la fragancia de las flores no puede ser suprimida, así Lahiri Mahasaya, viviendo calladamente como el hombre de hogar ideal, no podía ocultar su innata gloria. De todas partes de la India , los devotos acudían a buscar el néctar divino del maestro liberado… La armoniosa y equilibrada vida del gran gurú y hombre de hogar se convirtió en la inspiración de millares de hombres y mujeres.”
En su sitio web Self-Realization dice sobre Lahiri Mahasaya :
“Lahiri Mahasaya no estableció ninguna organización durante su vida, pero hizo esta predicción: ‘Cincuenta años después de mi muerte, la historia de mi vida será escrita debido al gran interés por el Yoga que se despertará en el Occidente. El mensaje del Yoga circundará el globo.”
“Lahiri Mahasaya entró en mahasamadhi en Benarés, el 26 de Septiembre de l895. Cincuenta años después, en América, su predicción fue cumplida cuando el creciente interés en el yoga inspiró a Paramahansa Yogananda a escribir la Autobiografía de un Yogui, la cual contiene una hermosa descripción de la vida de Lahiri Mahasaya.”
SWAMI SRI YUKTESWAR
Sri Yukteswarji era discípulo de Lahiri Mahasaya. Después de su encuentro con Mahavatar Babaji, (Gurú de Lahiri Mahasaya) en 1894, y a petición del Mahavatar, Sri Yukteswar escribió “La Ciencia Sagrada
Swami Sri Yukteswar entró en Mahasamadhi el 9 de Marzo de 1936, durante la visita a la India de Paramahansaji, después de 15 años de ausencia.
PARAMAHANSA YOGANANDA
“Como se ha descrito más arriba, Paramahansa Yogananda fue bendecido personalmente por Mahavatar Babaji, Lahiri Mahasaya y Swami Sri Yukteswar – los tres paramgurús en su linaje espiritual – para llevar a cabo la misión de diseminar el Kriya Yoga mundialmente.
“En su Autobiografía de Un Yogui él escribió: ‘La fundación en Occidente de la organización Self-Realization Fellowship, una colmena para la miel espiritual, fue un deber que me impusieron Sri Yukteswar y Mahavatar Babaji.’
“Paramahansa Yogananda nació el 5 de Enero de 1893, en Gorakhpur, India. Su nombre de familia era Mukunda Lal Ghosh. Desde sus tempranos años, era evidente para aquellos que le rodeaban que la profundidad de su percepción y su experiencia de lo espiritual iban mucho más allá de lo ordinario.
“Sus padres eran discípulos de Lahiri Mahasaya… Cuando Yogananda era un infante en los brazos de su madre, Lahiri Mahasaya lo bendijo y predijo: ‘Madrecita, tu hijo será un yogui. Como una locomotora espiritual, él conducirá muchas almas al reino de Dios.’
“En su juventud Mukunda buscó muchos de los santos y sabios de la India , esperando encontrar un maestro iluminado que le guiara en su búsqueda espiritual. Fue en 1910, a la edad de 17 años, que conoció al reverenciado Swami Sri Yukteswar Giri, y se convirtió en su discípulo. Pasó la mayor parte de los diez años siguientes en la ermita de este gran maestro, recibiendo de Sri Yukteswar una disciplina espiritual estricta, pero amorosa.
“En 1915, después de haberse graduado en la Universidad de Calcuta, tomó los votos de monje en la antigua y venerable “Orden de los Swamis” de la India , recibiendo el nombre de Yogananda (que significa bienaventuranza, ananda, mediante la unión divina, yoga). Su ardiente deseo de consagrar su vida al amor y al servicio de Dios fue realizado.
“Un día, en 1920, mientras meditaba en la escuela de Ranchi, Yogananda tuvo una visión divina, mostrándole que ahora era el momento de comenzar su obra en Occidente. Inmediatamente partió para Calcuta, y al día siguiente fue invitado a servir como delegado de la India en el Congreso Internacional de líderes religiosos que se llevaría a cabo en Boston. Sri Yukteswar le confirmó que era el momento, diciendo: ‘Todas las puertas están abiertas para ti. Es ahora o nunca.’
“Poco antes de su partida, Yogananda fue visitado por Mahavatar Babaji, el inmortal maestro que revivió para esta era la antigua ciencia del Kriya Yoga. ‘Eres el que he escogido para esparcir el mensaje de Kriya en Occidente’, le dijo Babaji. ‘Hace mucho tiempo encontré a tu Gurú Yukteswar en una Kumbha Mela; le dije entonces que te enviaría a él para tu entrenamiento.’
“El joven Swami llegó a Boston en Septiembre de 1920. A principios de 1925, estableció la sede internacional de Self-Realization Fellowship en Mt. Washington, en Los Angeles, California. Entre aquellos que se convirtieron en sus estudiantes había muchas figuras prominentes en las ciencias, negocios y las artes, incluyendo al horticulturista Lutero Burbank, la soprano Amelita Galli-Curci, George Eastman (inventor de la cámara Kodak), el poeta Edwin Markham, y el director de orquesta Leopoldo Stokowski. En 1927 fue recibido oficialmente en la Casa Blanca
“En 1929, durante un viaje de dos meses a México, sembró las semillas del futuro crecimiento de su obra en Latinoamérica. Fue recibido por el presidente de México, Dr. Emilio Portes Gil, quien se convirtió en un admirador de las enseñanzas de Yogananda.
“El 7 de Marzo de 1952, al terminar un discurso en un banquete en el Hotel Biltmore en Los Angeles, en honor del Embajador de la India ante los Estados Unidos, el gran Gurú entró en Mahasamadhi, el abandono definitivo de su cuerpo físico, realizado en forma consciente y voluntaria por un maestro iluminado.
“Su deceso fue marcado por un extraordinario fenómeno. En una carta certificada por notario, el Director del Cementerio de Forest Lawn testificó: ‘No había señal alguna de descomposición física en su cuerpo, incluso veinte días después de su muerte… Este estado de perfecta preservación de un cuerpo es, en lo que conocemos de los anales mortuorios, un caso sin paralelo… el cuerpo de Yogananda se encontraba aparentemente en un estado de extraordinaria inmutabilidad.’”
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